Este camarógrafo estaba en medio de la grabación de una entrevista haciendo su trabajo como de costumbre, pero resulta que la locación para la misma era en un establo, por ende estaba lleno de estos hermosos cuadrúpedos, caballos de todas las especies.

Mientras filmaba apoyado en una madera del establo, notó que uno de los caballos empezaba a recostarse en su hombro, poco a poco poniéndose más cómodo y cariñoso le iba lamiendo y luego mordiendo la oreja. Debido a que el entrevistador no paraba de hacer su trabajo el joven camarógrafo no tuvo más opción que aguantar las mordidas y cosquillas que le hacía el animal.

El curioso video ya se encuentra en YouTube para alegrar a las personas haciéndolas reír. Después de todo, quizás sólo quería un poco de popularidad.