Inimaginable. En la actualidad los ya forman parte de nuestras vidas. Hace 10 años, era impensable que estos convivieran con nosotros, o que la inteligencia artificial asaltara nuestro mundo rápidamente. Pero eso ya es una realidad.

Hace poco vimos una demostración de cómo Sophia, la robot que funciona con IA, ya podía caminar, ahora se ha creado un primer insecto robot que vuela sin cables y que te dará miedo por este insólito detalle.

Este bicho metálico pesa 190 miligramos, casi como un palito de dientes, y ha sido creado por un grupo de expertos y estudiantes de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Washington (UW), en EE UU.

Su nombre es RoboFly y es capaz de surcar el aire, agua, entre otros suelos. Puede que esté bien la creación de nuevos robots. Pero qué tanto pueden ser útiles.

Aunque parezca una tontería, este robot mini puede convertirse en un espía pues al volar cierta cantidad de metros, puede meterse al hogar de cualquier persona y registrar, en caso se le incorpore una cámara o micrófono, diversas cosas que no deseas que sepas.

El grupo de ingenieros ha explicado en su estudio que el auténtico hito de este invento es que han conseguido el primer despegue inalámbrico de un insecto robótico. Y para hacerlo tuvieron que enfrentarse a tres problemas: los motores y las hélices necesarias para volar no funcionan bien en tamaños tan pequeños, las baterías más reducidas que existen para realizar vuelos inalámbricos pesan demasiado para un insecto robot y, además, crear circuitos eléctricos y motores lo suficientemente ligeros para que el robot pueda volar es complejo.

El objetivo de esta creación, según los científicos es vigilar cultivos y fuentes de contaminación, detectar fugas en tuberías y refinerías, y ayudar en búsquedas y rescates. Sin embargo, no perdamos el ojo en el anterior detalle.