La aparición de “Duque” (Andrés Silva) para oscurecer el día más feliz en las vidas de Salvador (Christian Domínguez) y Catalina (Maria Grazia Gamarra) marcó el final de una primera temporada que tuvo llantos y mucha sangre.

En el inicio de la segunda temporada, un desesperado Salvador intenta de todas las formas salvar la vida de su novia y conduce directo a una clínica, donde Catalina es atendida de inmediato y es estabilizada a tiempo.