El torero español fue el invitado especial de Esto es Guerra, espacio que lo recibió de una manera que, estamos seguros, no podrá olvidar.

Antonio Pavón fue inquietado con las pícaras pruebas, donde olvidó a su novia Shirley Rojas y coqueteó con su contendora rosando de manera muy sensual sus labios con los de él.

Para ganar se tenía que adivinar, con los ojos cerrados, con qué le untaron los labios a su contendiente. El español resultó muy empeñoso.

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