A pesar de las arrugas que lucen los Rolling Stones, el tiempo parece que no pasa para Sus Satánicas Majestades, que volvieron en plena forma al londinense Hyde Park para repetir en este mismo escenario su mítico concierto de hace más de cuatro décadas. Cuarenta y cuatro años y un día después, Mick Jagger y Keith Richards volvieron a liderar ante decenas de miles de fans la banda británica, acompañados por otros dos históricos “stones” como Ron Wood y Charlie Watts.

Aquel 5 de julio de 1969, Jagger saltó al escenario vestido de blanco y recitando un poema de Percy Bysshe Shelley en honor de su guitarrista Brian Jones, quien había fallecido solo dos días antes y por el que el cantante soltó miles de mariposas al cielo. El arranque perfecto para una noche a la que había precedido una calurosa jornada en este parque londinense, donde abrieron otros grupos y artistas como The Vaccines, The Temper Trap, Gary Clark, Jr. o King Charles.

Y daba así el pistoletazo de salida de casi dos horas de altas dosis de rock y de nostalgia, con Jagger preguntando “¿Cómo estáis?” antes de atacar el segundo tema del repertorio, otro himno como “It’s Only Rock And Roll (But I Like It)” (1974). Aunque no hiciera falta, Keith Richards subió la temperatura del evento con su primer solo de la noche durante este clásico, el primero de muchos, si bien muchos de ellos fueron de fechas posteriores a 1969.

“¡Un gran hola a Londres, Inglaterra y Hyde Park! ¿Alguien estuvo aquí en 1969?” inquirió Jagger, listo para “Tumbling Dice” (1972), el dado de la suerte (y el talento) que ha convertido a los Rolling en una marca global imperecedera. No muere porque así lo quieren también las nuevas generaciones, a las que se dirigen estos casi septuagenarios desde las redes sociales para pedirles interacción o, este caso, que voten por una canción para incluirla en el “set”.

Por petición popular resultó ser “All Down The Line” (1972), a la que siguió “Beast of Burden” (1978), un poco “soul” para el alma de las más de 200 mil almas que se dieron cita en Hyde Park, y otra más reciente como “Doom and Gloom”, tema incluido en su último álbum “GRRR!” (2012). Tuvieron que pasar “Bitch” (1971), que interpretaron con Gary Clark Jr., y “Paint it Black” (1966) hasta que por fin sonó algún tema del primer “Stones in the Park” y no podía ser otro que “Honky Tonk Women” (1969).

Pero hubo que esperar durante otros tres temas más, “You Got the Silver” (1969) “Before The Make Me Run” (1978) y “Miss You” (1978), para volver a meterse en la máquina del tiempo. De esta salió el guitarrista Mick Taylor, cuyo primer concierto con los Stones no fue otro que aquel de Hyde Park, cuando tuvo la difícil y delicada papeleta de sustituir al fallecido Jones.

“Nos le acabamos de encontrar en un pub y le acabamos de poner ante 200.000 personas”, bromeó Jagger, quien, a la armónica, interpretó con él “Midnight Rambler (1969). Con la familia casi al completo, los Stones completaron una noche histórica con “Gimme Shelter” (1969), “Jupmin’ Jack Flash” (1968), “Sympathy For the Devil” (1968) y Brown Sugar (1971).

Y para demostrar que está en forma, hasta se marcaron un par de bises con “You Can’t Always Get What You Want” (1969) y “(I Can’t Get No) Satisfaction (1965).

EFE