El futbol y el rock son dos pasiones que mueven multitudes, pero cuando estas dos pasiones se juntan en un solo espectáculo, consiguen un show inolvidable y que difícilmente podrá ser igualado.

La noche del 07 de octubre, distó de ser una noche cualquiera, para incluso convertirse en histórica, pues nuestra selección nos regaló un triunfo que nos regresa la esperanza de pensar en el Mundial; y los peruanos fuimos testigos de la potencia de una legendaria banda, solo superadas por maestros del género como Ramones o Sex Pistols.

LA MAGIA DEL POGO

Aunque la asistencia fue bastante baja – se esperaban a 5 mil fanáticos, pero apenas alcanzaron 2 mil – el poco público que fue no se amilanó *y se entregó en cuerpo y alma a los pogo*s demostrando que mil veces mejor son 2 mil punkers viviendo el concierto a 40 mil personas grabando todo el show.

Diazepunk y los argentinos Shaila fueron los primeros en subir al escenario. Interpretando lo mejor de sus producciones, los rockeros dejaron satisfecho al respetable que cargado de energía se sentaba a ver el partido.

PASIÓN DE MULTITUDES

Finalizado el show de la banda gaucha, tocó la hora de apoyar a nuestra selección, y en las dos pantallas gigantes del escenario los asistentes pudimos gozar del ‘guerrero’ encuentro que tuvieron nuestros muchachos.

Aunque esta no es una crónica deportiva, sino el recuento de un espectáculo, no podemos pasar por alto la vibra que se vivió en el recinto sanmarquino. A pesar de la poca gente, todos se unieron a una sola voz, en el primer – y quizás único – concierto en el que se pueda disfrutar de un triunfo peruano y de un cartel de impresionantes bandas en escena.

INYECTORES ENCENDIERON MOTORES

“¡Arriba el Perú, carajo!”, fue el grito guerrero con el que Inyectores inició, ni bien acabado el encuentro, su show. ‘Bombardero’ sonaba en los alto parlantes, y todos aquellos que vivimos el mejor momento de la escena under peruana, allá por el 2000, no pudimos huir del irresistible pogo.

Los dirigidos por Gonzalo Farfán, tocaron un delicioso cocktail de temas que, a pesar del poco tiempo en escena, supieron mantener contentos a los presentes.

Un punto a favor del show y del cual muchos deben aprender, es que los asistentes en todo momento vivieron el concierto lejos de grabaciones y camaritas, y viviendo el pogo a mil. Ojalá aprendan los que decepcionaron a Limp Bizkit en la Explanada del Monumental.

Como no podía ser para menos, el grito característico de ‘Antisocial’, legendario tema de G3, cerró la puesta en escena de nuestros créditos nacionales quienes desde hace mucho merecían telonear a un grande.

EL NÚMERO 14

Finalmente, tras largos meses de espera y hasta protestas evangélicas, la legendario banda de California pisó el escenario de la Tribuna Norte del Estadio San Marcos en el que un público, ya bastante caliente, los esperaba para rememorar grandes glorias del punk harcore.

El setlist de 26 canciones fue cuidadosamente escogido, y es que al tratarse de una banda que celebra 30 años de existencia, era de esperarse la inclusión de todos sus clásicos por lo que los peruanos terminamos más que felices.

La lista incluyó temas como ‘21st century (Digital Boy)’, ‘Los Angeles is burning’, ‘American Jesus’, la coreadaza ‘Generator’, ‘Do what you want’, ‘Infection’ entre otras.

Cabe anotar que lo más resaltante de la noche fue que los rockeros se unieron a la fiebre futbolera y dos de sus miembros – el guitarrista Brett Gurewitz y el vocalista Greg Graffin) aparecieron con camisetas de nuestra selección y tocaron con ellas toda la noche.

En el caso de Mr. Brett, lució la clásica camiseta de fútbol sin número visible, y en el caso de Greg utilizó la camiseta alterna color rojo, con el número 14 en el pecho. “Felicitaciones a los hinchas del fútbol, aunque nosotros preferimos jugar golf”, indicó el cantante.

Sin duda una poderosa noche llena de emoción, pogos, gritos, llantos, puñetes, patadas, chela, buen fútbol y harto punk rock. Para los muchachitos del ayer, sin duda recordaron sus instantes de adolescencia, y para los de las nuevas generaciones, tuvimos el lujo de ver a una legendaria agrupación. ¡Salud!

Robinson Reyna

@rob_core en Twitter