Con un poema dedicado a la mujer, la cantante mexicana Natalia Lafourcade fue recibida por primera vez por el público peruano con fuertes palmas y gritos de emoción un poco más de las 10 de la noche. Ni bien pudo armarse de su guitarra entonó la bella “María bonita”.

La letra original de Agustín Lara, sumado a los acordes de Natalia, bastaron para que Natalia marque el camino de lo que sería su esperada presentación. Finalizando la canción hicieron su ingreso casi de manera desapercibida toda su banda, ocupando sus respectivos puestos.

Los asistentes al Auditorio Los Incas no desaprovecharon en acompañar a Natalia con los coros de los temas de Agustín Lara, parte de su último disco “Mujer divina”. Así fue con las canciones que vinieron “Piensa en mí” y “La Fugitiva”.

En más de una ocasión, la cantante mexicana de 30 años se mostró claramente emocionada por el recibimiento y cariño, expresando con una gran sonrisa lo feliz que se sentía y lo cómoda que estaba.

“¿Cómo está Perú? ¿Cómo está Lima? Es un placer estar aquí, muchas gracias por su recibimiento. Se siente una energía increíble”, comentó risueña.

Con su melódica voz, Natalia expresó que dedicaba el tema “Mujer divina” a “todas las mujeres divinas de Perú” antes de empezar a tocarla, lo que le valió la ovación de la audiencia. “Amor, amor de mis amores”, fue otra prueba de la poder de registro que alcanza en vivo.

Llegada las 11 de la noche, Lafourcade empezó con los temas de su autoría. Y la emoción recorrió el auditorio cuando se escucharon las primeras notas de “Amarte duele”, interpretada con suma pasión por parte de la artista. Sin pausa alguna vino “Casa”, canción que tocaba con su recordada banda “La Forquetina”.

Siguiendo el bloque de temas propios “Elefantes” (en una versión diferente a la del disco), “Te quiero dar” y “Un pato”. Luego vendría la popular “En el 2000”, la cual hizo parar a los asistentes, como acercarse a bailar al pie del escenario para no volver a sentarse en sus asientos en lo que restó del concierto.

“Los de seguridad siguen asustados. Si no va a pasar nada, nuestra música es suave”, expresó la cantante con cariño a sus fanáticos.

Volvió a entregarnos su última obra interpretando los temas “Si no pueden quererte”, “Limosna” y “Aventurera”. La sorpresa de la noche fue cuando llamó a su amiga Pamela Rodríguez, quien fue la encargada de abrir el concierto, para cantar juntas el tema “Ella es bonita”. Lo que fue una delicia tanto para el público como para las cantantes.

Pero luego el ambiente se puso más serio cuando la cantante hizo escuchar su compromiso político-social con “Un Derecho de nacimiento”. Luego de ausentarse del escenario por unos momentos, toda la banda y Natalia regresaron para regalar la tan pedida “Azul”.

Finalmente, se despidió de este país que tan bien la recibió con “Cursis melodias”, letra que fue disfrutada tanto por su club de fans presente en primera fila y que lleva el mismo nombre del tema, como por el resto de los asistentes que aplaudieron hasta el final a la menuda y potente cantante junto a su banda. ¡Un concierto esperado que, sin duda, debe repetirse!

Por: Xavier Alvarado (@xavier_alvarado)