La noche del viernes (16 de mayo), que se vislumbraba como una multitudinaria velada romántica, terminó convirtiéndose en un festival casi privado debido al escaso público asistente que se reunió en el Jockey Club para contagiarse del romanticismo latinoamericano de los baladistas del momento, el dúo mexicano Río Roma, Axel y Luis Fonsi.

El cada vez más intenso frío de la noche endureció al público, que tuvo una escasa respuesta a los innumerables estímulos de sus artistas. Y es que, al parecer, todas las personas que se reunieron en el conocido recinto, esperaban la aparición del menudo cantante puertorriqueño (Fonsi), quien subió al escenario luego de cuatro horas de espera, saciando las ansias de amor y testosterona que tenían las miles de fanáticas que se dieron cita en el Jockey Club.

La dulce voz de la cantante nacional Nicole Pillman inició la noche romántica, quien a pesar de dejarlo todo en el escenario y demostrar que Perú sigue exportando baladistas de calidad, recibió muy poca respuesta del público, que solo esperaba la llegada de las grandes figuras del cartel.

El caudal romántico del Río Roma

La noche se encendió con un abrir y cerrar de ojos con el solo anuncio de la llegada del dúo mexicano formado por los hermanos Ortega Castro, quienes con su voz, sensualidad y romanticismo conquistaron a las miles de jovencitas y parejas melosas, que emocionadas no desaprovecharon el momento para prometerse amor eterno.

En medio de sus clásicos medios tiempos, sentimentales líricas e himnos de las parejas más enamoradas, el dúo entregó un poco atinado popurrí de covers que trajo de vuelta a los Enanitos Verdes, Soda Stereo, Maná y Alejandra Guzmán, dándole un giro inesperado a su presentación.

La noche de los mexicanos acabó cuando subieron al escenario a una de sus seguidoras, a quien bautizaron como “La chica romántica”. Previo regalo de un dije de corazón, los integrantes del dúo procedieron al “selfie” del rigor, donde la fan aprovechó para besar a uno de ellos.

Axel y su nuevo look

A pesar de no pisar tierras peruanas hace largo tiempo, el argentino Axel encontró la fórmula perfecta para robarse el corazón de todo el público, pues luego de haber interpretado varios temas poco conocidos, presentó la mezcla perfecta entre patriotismo, corazón y música, las cuales expresó cantando un huayno al ritmo de charango y antes de bajar del escenario sorprender a todos interpretando el conocido vals peruano “Ódiame”.

Antes de su despedida, dejó boquiabiertos a los asistentes cuando decidió lanzarse del escenario y en brazos de su seguridad recorrer todo el campo SuperVip para llegar a tocar las manos del público que no llegaba a alcanzarlo en la segunda zona. Esta locura bajo la lluvia hizo que todos los privilegiados que podían ver el show desde adelante se abalancen contra el argentino para buscar una instantánea del inesperado momento.

El pequeño gigante de la balada

La explanada del Jockey Club se fue vaciando mientras los minutos pasaban y los amores platónicos de las fanáticas no aparecían sobre el escenario; el frío y la lluvia hicieron de la espera un verdadero calvario. Pero todo fue resuelto minutos antes de la una de la mañana, cuando una pequeña sombra apareció, provocando un solo grito fervoroso y lleno de amor, el cual le dio la bienvenida a Luis Fonsi.

Las féminas se alborotaron con la llegada del artista más esperado de la noche, quien colmó las expectativas de sus seguidoras al interpretar sus más conocidos temas, haciendo suspirar a hombres y mujeres, entre los cuales destacan ‘Imagíname sin ti’, ‘Quiero amarte hoy’, ‘Nada es para siempre’, ‘Se supone’ y ‘Yo no me doy por vencido’ que tocaron el corazón hasta del macho más fuerte.

Por: Paola Guerra (@paolaguerrav)