La visita de One Direction a Australia está siendo bastante llamativa. Harry Styles parece no haberse tomado demasiado en serio los regaños de su discográfica tras perder una fortuna el año pasado en varios salones recreativos, ya que fue visto este jueves en el casino Pearl Room de la localidad australiana de Perth probando suerte con la ruleta y apostando elevadas sumas de dinero.

“One Direction es el grupo más popular del momento y los chicos también se merecen disfrutar de un poco de tiempo libre. Pero hay una gran diferencia entre salir de fiesta o pasar el rato en la playa y gastar buena parte de tus ahorros jugando a la ruleta. La situación es grave teniendo en cuenta que el año pasado Harry desarrolló una obsesión por el juego que casi roza la adicción”, comentó un miembro de su círculo cercano al diario Daily Star.

“La ruleta es un juego muy adictivo y peligroso, y aunque Harry tiene millones en el banco, es sorprendente lo rápido que se pueden gastar. Está claro que puede hacer lo que quiera, pero también tiene que mantener una imagen pública para sus fans”, explicó el confidente al mismo medio.