Luego de participar con éxito en el 798 Art Zone de China, un complejo al noroeste de Pekín, donde realizaron un concierto y entregaron lo mejor de nuestra cultura, y se presentaron en Peru.com para contarnos sus experiencia.

“Fue hermoso, realmente es la primera vez que viajo a China, un país donde no sabes hablar el idioma, tampoco sé hablar el inglés. Fue una experiencia muy linda”, dijo una emocionada Saywa, quien resaltó que vivir esta experiencia con su hija fue “realmente mágico”.

“Para mi en particular estar con Damaris en este escenario fue mágico, yo trato de conectarme con mi tradición, mis ancestros cuando estoy en el escenario, y tenerla ahí a mi hija es como continuar con la tradición. Esa conexión es realmente hermosa, llevar lo del Perú a este escenario es mágico”, acotó la destacada cantante peruana de música folclórica.

Por su parte, la joven intérprete Damaris contó que este viaje lo considera un regalo que le ha dado la vida.

“Yo lo recibo como un regalo. Viajar para cantar, a eso súmale poder compartir con tu mamá, es una bendición. He estado feliz en este viaje. Nos hemos conectado con el arte, me regreso con esta sensación de que no estamos tan lejanos. Desde que llegamos a China fueron días muy intensos. Los ciudadanos chinos estaban muy interesado de conocer este arte”, explicó Damaris.

En la entrevista, Saywa comentó que aunque siempre vio en Damaris el gusto por la música, nunca imaginó que ella se dedicaría a este arte.

“He hecho con Damaris lo que no he hecho con mis otros hijos, donde iba la llevaba a Damaris. Ella era receptiva a la música, lo disfrutaba, pero nunca me imaginé que se iba a dedicar a ello. Se ha involucrado mucho”, contó.

Por su parte, la ganadora de la Gaviota de Plata tras cantar Tusuykusun, agradeció la oportunidad que le dio su madre al prestarle su escenario en sus inicios, sin embargo, señaló que no es fácil seguir el camino con la misma energía.

“Yo a la música le agradezco mucho. Lo difícil de toda carrera es mantenerse, poder sostener esa energía viva. Yo agradezco la posibilidad de subirme a un escenario siempre. Creo que lo difícil es eso, eso no te lo da el hecho de tener una familia artista. En un principio reconozco de que fui bendecida de tener la ayuda de mi mamá, me dejaba cantar en su escenario”, explicó la joven.

“Una manera de agradecer lo que me dio mi mamá es poder actuar juntas, poder mostrar un Perú alegre, fuerte, solemne, tradicional y con mucho sentimiento”, acotó.

Finalmente ambas confesaron que todos los días cada una aprende de la otra como profesional. “Yo aprendí a arriesgarme por ella, desde chica recuerdo ver a una artista que empezó joven, se hizo su espacio sola y quería aportar más siempre. Su fuerza y perseverancia”, dijo Damaris.

“Yo admiro su fuerza, esa lucha por lo que quiere. Siempre quiere hacer algo nuevo y cree en lo que hace”, continuó Saywa.

Damaris y Saywa se sienten orgullosas de la tierra que los vio nacer y no se cansan en el intento de proyectarlo en su gente, aquellos que saben valorar la tradición y la cultura de nuestro Perú. Es por ello que no dejan de producir y hasta de componer.

Saywa viene promocionando su disco Ayni, mientras que Damaris hace lo propio con Puedes volar, ambas producciones pueden escucharla en diversas plataformas de música.