Se le acabó la felicidad a Britney Spears, pues a pesar de que la semana pasada fue sorprendida por su novio Jason Trawick con un anillo de compromiso, esta semana fue demandada por su propio equipo de guardaespaldas.

La estrella se negó a pagar 300 mil dólares por un año del servicio de sus agentes de seguridad, y es que no habría utilizado a los guardaespaldas todos los meses. La suma demandada es de 141 mil 625 dólares, según indicó el portal TMZ.

Según la empresa de seguridad, Britney ha tenido un comportamiento extraño hacia ellos desde la demanda que interpuso uno de sus elementos por acoso sexual, al grado de despedirlos y no pagarles la cantidad que habían acordado desde un principio.