Esta navidad empecemos a limpiar nuestra casa principal que es nuestro cuerpo y, especialmente, nuestra mente para así recibir y vibrar en esta energía especial del espíritu navideño de nacimiento. Josie Diez Canseco te muestra cómo renovar tu espacio con efectividad generando buena vibra.

Preparemos nuestro ser interno adecuando también nuestro entorno. Las cargas sufridas, los disgustos, las enfermedades, son energía. Nuestra casa, al igual que nosotros mismos, recibe y almacena esa energía. Todo queda en el cuerpo energético del hogar. Reordenando, limpiando y deshaciéndonos de objetos a los que ya no damos utilidad también preparamos el lugar en que vivimos y que es una imagen de nuestro estado interno.

Aprovechemos este período vibratorio para reflexionar, recomponer, renacer. Cuando ponemos orden lo que estaba en desorden vuelve a su sitio. También cuando ciertos objetos son desechados, porque ya no tienen un lugar en nuestra vida, generamos un efecto directo en nuestra psique y así liberamos energía para vivir el presente.

Estemos atentos, en el momento de poner manos a la obra en el arreglo de la casa, ya que los objetos pueden aumentar o disminuir nuestros niveles de energía. Algunos elevan nuestra energía gracias a sus energías positivas que nos despiertan y nos expansionan ya que complacen nuestros sentidos.

Algunas cosas están definidas por la energía del significado que les otorgamos y cuando esa vibración es maravillosa puede que signifique subjetivamente el amor que ese alguien que lo regaló o lo usaba nos profesa.

Por otra parte habrá objetos que nos sean desagradables, que nos afecten negativamente y nos estén vaciando de energía sin que seamos conscientes de ello. La solución es deshacerse de estos objetos sin aferrarse a ellos.

Los inciensos, los perfumes, por ejemplo, nos inducen a una meditación en ese entorno ordenado y limpio sobre la liberación de todos los procesos energéticos negativos. Al despejar la casa, despejamos la vida y el alma, renaciendo en un espacio externo-interno de energía disponible para el aquí y el ahora.

En éste año nuevo que comienza, que todas las cosas bonitas que decretemos lleguen a nuestra vida.