Elementos que conforman la oración curativa

La oración especialmente curativa requiere de una serie de elementos como los siguientes:

Fe: Tal vez el elemento más importante especialmente en la oración curativa, ya que sólo si se tiene ella se logra que Dios conceda lo pedido.

Repetición. En este caso el lema es: “Si al principio no tienes éxito, inténtalo de nuevo”. San Lucas recomienda en su Evangelio (18:1-7) la perseverancia en la oración, aun cuando lo que pidamos se nos niegue repetidamente.

Urgencia. Este es el nivel de necesidad y desesperación que alcanza uno.La Epístola de Santiago (5:16) insta a la gente de esta manera: “Confesaos, pues, mutuamente vuestros pecados y orad los unos por los otros, para que seáis curados”.

Ayuno. En ayuno es importante, ya que, en Mateo, 6:18, Cristo dice que la recompensa podría obtenerse por medio del ayuno. Por ello, muchas personas consideran que su oración tendrá más efectividad o poder si ayunan antes de decir una plegaria de petición o intercesión curativa.

Actuación sobre el resultado. El solicitante empieza a comportarse como si la oración hubiera sido atendida, antes de que los resultados sean evidentes. Marcos (11:24) afirma: «Por eso os digo: todo cuanto pidáis en la oración, creed que ya lo habéis recibido y lo obtendréis”.

Cómo y cuándo se debe rezar la oración curativa

Cualquier instante es bueno para elevar una plegaria, pero, se deben aprovechar los momentos de mayor somnolencia (al despertar y antes de caer en sueño profundo).

Conviene estar sentado para evitar que el sueño lo domine, con la espalda recta, los ojos entrecerrados y la atención puesta en la parte posterior de la cabeza, concretamente en el bulbo raquídeo, zona vital para el proceso de sanación donde se concentra toda la energía vital del cerebro, la médula espinal, las glándulas y los chacras

Se debe pronunciar la plegaria en voz alta y es necesario repetirla disminuyendo cada vez más el tono de voz hasta pronunciarla mentalmente.

Para que la oración curativa sea concedida, es importante el ejercicio constante y que las plegarias estén libres de cualquier asomo de duda e incertidumbre.

Cuando se ora para curar alguna persona o a uno mismo no se debe hacer referencia a la enfermedad sino en el bienestar del órgano o zona afectada. En el caso de la oración por problemas de salud emocional o psíquica, se debe concentrar en su opuesto. Por ejemplo, si sufre de depresión, se pide alegría y fortaleza para seguir adelante.

Fuente: Consultorio Esotérico.