Como por ejemplo, integración con Kinect. Esa integración no se tratará de mover los brazos con gestos extraños, sino más bien para comandos de voz.

Mike Laidlaw, productor de Bioware, explicó a la revista oficial de Xbox que estos comandos serán muy similares a lo que se conoció en Mass Effect 3. En ese juego, una de las características más útiles de la cámara era justamente darle órdenes al resto del equipo sin entrar al menú destinado a aquello. Menos interesantes eran las de utilizar la voz como respuesta a las opciones de diálogos o la de ejecutar acciones específicas como abrir puertas, pero todas tenían su espacio y ninguna era realmente invasiva o molesta.

Dentro de un género similar al de Dragon Age, Bethesda también probó los comandos de voz para ciertas acciones muy limitadas en Skyrim. Más allá de ser una mera curiosidad, la opción de gritar fus ro dah a la pantalla para muchos debe haber sido realmente liberador.

Dragon Age: Inquisition se estrena este mismo año en formato multigeneracional: Xbox 360, Xbox One, PlayStation 3, PlayStation 4 y PC.