La cantante vernacular fue trasladada de la sala de requisitorias del Poder Judicial aguardada por decenas de curiosos y futbolistas. Hasta allá asistieron su abogado, Luis Tudela y su amiga Zundy Culquimboz, quien incluso le llevó a su mascota.

Al llegar al Penal de Santa Mónica, donde era aguardada por decenas de periodistas el desorden se apoderó del momento, pero finalmente la intérprete, quien fue llevada con chaleco antibalas, fue internada por segunda vez.

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