En el último capítulo de , Gustavo () y Luciana () acudieron al departamento de Cristina () para intentar persuadir sobre la verdadera procedencia de Rafaelita.

Cristina no soportó la impertinencia de los Souza Sanguinetti, a quienes los encaró y los echó de su departamento diciéndoles que Rafaelita es su hija y que nada ni nadie le hará cambiar su papel de madre.