La presentadora de televisión Kim Kardashian, vivió el riesgo al limite al meterse a a nadar al lado de tiburones y mantarrayas, en las playas de Bora Bora, hasta donde llegó acompañada de su esposo y su familia.

La bella modelo declaró que aunque parezca una actividad peligrosa, no se habrían arriesgado si no fuera seguro. “Desde antes de tomar la decisión de bajar de la lancha estuve consciente de que muchísimas personas acuden al lugar todos los días, y que, los animales marinos ya han demostrado ser inofensivos”, sostuvo, aún así confesó que sí sintieron algo de miedo.