Antonio Banderas regresó una vez más por Semana Santa su natal Málaga, al sur de España, para alejarse del ritmo de sus actividades mediáticas y estar más cerca de los suyos.

Como años atrás, Banderas participa de los eventos de la Semana Santa malagueña y este lunes marchó en el desfile procesional de María Santísima de Lágrimas y Favores. El artista llegó sin su esposa Melanie Griffith y sin sus hijos.

“Lo más bonito de la Semana Santa es que todavía es muy imperfecta y hay muchas cosas por hacer, lo que permite tener un campo de actuación muy grande y un futuro enorme”, señaló el actor en diálogo con EFE mientras salía de la Iglesia de San Juan de Málaga.

Pese a que por ahora busca descansar, entre sus próximos proyectos cinematográficos se encuentra la película “Guernica”, donde también se encargará de la producción y financiación.