Los creadores del cortometraje chileno “Historia de un oso”, que ganó el domingo pasado el primer Oscar para el país vecino, fueron recibidos por la presidenta Michelle Bachelet en el Palacio de La Moneda, la sede del Gobierno.
Decenas de personas se juntaron en la entrada de la casa de Gobierno chilena para felicitar a los ganadores en la categoría “Mejor corto animado” otorgado por la academia de cine estadounidense.
El director del cortometraje, Gabriel Osorio, señaló a los periodistas que “estamos dándonos cuenta recién de lo que significa acá en Chile el Oscar. Nunca imaginé que iba a ser tan increíble. Estamos felices y seguro que (el premio) nos va a abrir muchas puertas, no sólo a nosotros sino a todo el mundo del cine en Chile”, aseveró.
El realizador llegó la tarde de este martes 1 de marzo junto a su equipo de Punk Robot a suelo chileno y fueron trasladados de inmediato al Palacio de Gobierno para ser recibidos por Bachelet y el ministro de Cultura del país, Ernesto Ottone.
“Hay que romper las barreras, como que si es chileno no es de tan buena calidad la producción. En los Oscar estuvimos compitiendo con un cortometraje de Pixar. Sacamos la cara por Chile y por Latinoamérica”, señaló Osorio.
“Historia de un oso” está basada en la vida del abuelo de Gabriel Osorio, Leopoldo, quien vivió el exilio durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
“Independientemente que haya una lectura política, para mí siempre lo principal fue hablar de la familia, que siempre debe estar unida. Cuando yo hablé en el discurso (en los Oscar) sobre el exilio, que es una palabra que tiene una carga muy fuerte en Chile, pero para mí es algo mucho más simple, para mí es hablar sobre algo que está mal, es como decir que la guerra está mal”, dijo Osorio nieto.
“Queríamos entregar un mensaje más universal que es sobre la familia”, sentenció.
Leopoldo Osorio, que estuvo dos años en la cárcel después del 11 de septiembre de 1973, el día del golpe militar que dio inicio a la dictadura de Pinochet, también fue invitado al evento celebrado por el Gobierno austral, pero rechazó asistir.
“Voy a ir a La Moneda cuando cambien la Constitución de Pinochet”, señaló en una radio chilena durante la jornada el inspirador de la historia que ganó una estatuilla dorada, haciendo alusión a la glosa constitucional que se creó durante la dictadura en Chile y que aún sigue vigente.
Una pancarta de una de las personas que estaba en el frontis de La Moneda decía “Oso rebelde, no se rinde ni se vende”, en alusión al trasfondo de este cortometraje.
El productor de la cinta, Patricio Escala, aseveró en la ceremonia que “la presidenta (Bachelet) nos dijo que esto es un orgullo para el país. La gente nos recibió y nos dio regalos. También creemos que es importante de una manera darnos cuenta de lo que podemos conseguir nosotros como país”, comentó.
“Este es el resultado de un pequeño equipo de trabajo muy talentoso y creativo”, dijo Escala sobre el equipo de “Historia de un oso”.
Junto a los realizadores del cortometraje, destacó la presencia del dúo de indie pop chileno Dënver, que le dio la música a la película premiada.
(Fuente: EFE)
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