La nueva película de Nacho Vigalondo, Open Windows, “un thriller que tiene lugar en tiempo real”, estará protagonizada por Elijah Wood (El señor de los anillos) y Sasha Grey, exactriz porno que dio un giro a su carrera en The Girlfriend Experience, de Steven Soderberg.
Ambos han demostrado que no les gusta quedarse en lo que se espera de ellos. Desde que Grey se reinventó a sí misma, hace cinco años, le ha dado tiempo a trabajar con directores como Steven Soderbergh (“The girlfriend experience”), a escribir una novela erótica (“La sociedad Juliette”) y a ser modelo para firmas como American Apparel.
En cuanto a Elijah Wood, lejos de aprovechar el tirón de la trilogía de Peter Jackson, después de aquello optó a menudo por películas pequeñas, “Open Windows” es su tercera experiencia en el cine español, después de haber trabajado con Alex de la Iglesia y Eugenio Mira y por papeles arriesgados, desde el caníbal de “Sin City” al asesino en serie de “Maniac”.
“Cada película es un reto, y me gusta que sea así. No siempre elijo los trabajos por el papel; a veces simplemente se trata de ser parte de un proyecto que me parece interesante”, aseguró el actor norteamericano en la presentación oficial del filme.
“Pero, si hablamos de situaciones desafiantes, recuerdo una experiencia muy reciente. Un papel muy pequeño en una película llamada ‘Pawn Shop Chronicles’, del año pasado. Mi personaje era un tipo completamente loco y adicto al porno que se dedica a secuestrar y encerrar mujeres en jaulas”, contó.
“La escena que tenía que rodar era este personaje filmándose a sí mismo con esas mujeres y masturbándose al mismo tiempo. Estábamos en Louisiana. Tuve exactamente 20 minutos para rodar toda la escena, porque tenía el vuelo de vuelta esa misma tarde. No había tiempo para ensayar ni discutir nada, así que sí, fue algo único, muy interesante”, apuntó sonriendo, ante la mirada atónita de Grey.
En “Open Windows”, Elijah Wood es Nick Chambers, un fan de la actriz Jill Goddard (Sasha Grey) que cree que ha ganado un concurso para cenar con ella y acaba viéndose atrapado en una situación en la que tanto su vida como la de ella corren peligro.
El principal reto para ambos, en este caso, ha sido desarrollar sus personajes y las relaciones entre ellos sin apenas contacto físico, ya que todo sucede a través de la pantalla de un ordenador y en medio de un laberinto, tanto técnico con 15 cámaras grabando como de guión, con varias y sorprendentes vueltas de tuerca. EFE