Lo que algunas actrices buscan toda su carrera, Jennifer Lawrence lo pierde en menos de un año.

Tan solo han pasado ocho meses desde que la actriz recibiera su primer Oscar por su destacado papel en Silver Linings Playbook, pero parece haber sido tiempo suficiente para que la joven intérprete cerrara ese capítulo de su carrera y, de paso, olvidara por completo dónde ha guardado la preciada estatuilla.

“No tengo ni idea de dónde la he puesto, creo que la tengo guardada en Kentucky. Espero que esté ahí, porque si no es así, definitivamente creo que la he perdido para siempre”, reveló la intérprete a la revista española Acción Cine.

Una de las razones que explicarían el notable despiste de Jennifer, quien también atesora una nominación a los premios de la Academia por la aclamada Winter’s Bone, tendría que ver con el frenético ritmo de trabajo que le ha supuesto el rodaje de la secuela de Los juegos del hambre, una película que ha absorbido por completo el tiempo de la guapa artista por culpa de exigentes escenas como la que filmó recientemente en un pantano.