El grave accidente aéreo que sufrió Harrison Ford esta semana es uno más en la lista de serios infortunios protagonizados por estrellas de Hollywood que vieron la muerte muy cerca, pero sobrevivieron para contarlo.

Tal es el caso de estrellas como Sandra Bullock, quien se llevó un gran susto de muerte cuando el avión privado que la transportaba a Jackson Hole, en Wyoming, para pasar unas vacaciones cerca del parque de Yellowstone, perdió el control al tocar tierra tras romperse el tren delantero.

En 1998, Orlando Bloom sintió que volvía a nacer tras un accidente casero que le dejó temporalmente paralizado. El actor cayó desde una altura de tres pisos cuando la tubería por la que trepaba con la intención de subir hasta el tejado de una casa se desprendió por culpa del peso. En ese entonces tenía 21 años, se rompió varias vértebras y quedó sin movilidad durante cuatro días. Tuvo que someterse a 18 meses de rehabilitación y se recuperó justo a tiempo para rodar la primera parte de “The Lord of the Rings”.

Menos afortunado fue Christopher Reeve, el más famoso de todos los Supermán que han surcado la gran pantalla. En 1995, cuando participaba en unas competiciones ecuestres en Virginia, Reeve salió despedido de lomos de su caballo con la mala suerte de golpearse la nuca contra el suelo. A sus 42 años, Reeve se fracturó las dos vértebras superiores y quedó tetrapléjico, obligado a usar un respirador artificial hasta que falleció en 2004 por un fallo cardíaco.

Desde 2008, Morgan Freeman carece de movilidad en su mano izquierda a consecuencia de un serio accidente de tráfico que sufrió en el estado de Misisipi. El vehículo que conducía se salió de la carretera y quedó destrozado tras dar varias vueltas de campana por un terraplén. El actor y su acompañante tuvieron que ser rescatados de entre la chatarra y hospitalizados.

Shia LaBeouf tuvo también que ser operado de la mano izquierda en 2008 cuando volcó la camioneta que conducía por Hollywood, mientras que el cineasta George Lucas (“Star Wars”) reconoció en una entrevista con Oprah Winfrey en 2012 que debería haber muerto en un terrible accidente de coche en 1962.

Arnold Schwarzenegger acabó también en urgencias en 2001 al romperse seis costillas al estrellarse con su motocicleta.

Gerard Butler, conocido actor del género de acción por películas como “300”, pensó que no salía vivo del rodaje de “Chasing Mavericks” en 2011.

EFE