Cuando se confirmó que el rodaje de la nueva entrega de James Bond estaba parado de manera indefinida, Daniel Craig empezó a buscarse nuevos proyectos para seguir en forma y a su vez mantenerse en la élite de Hollywood. En esta ocasión, prefiere reinventarse haciendo su primera película de motion capture, “Las Aventuras de Tintín: El Secreto del Unicornio”, y protagonizando un thriller en el que interpreta a un personaje con una gran carga emocional, el de esta película, “Detrás de las Paredes”.

“Detrás de las Paredes” es el típico thriller de moda en el que nada es como parece, tipo “Shutter Island” e “Intruders”, aunque salvando las distancias, que trata de mantener al espectador intrigado hasta el final, dando la vuelta a la historia en varias ocasiones.

Will Atenton (Daniel Craig) acaba de comprar una casa junto a su mujer Libby (Rachel Weisz) y sus dos hijas, Dee Dee (Claire Geare) y Trish (Taylor Geare). Un día, mientras aún están instalándose en la casa, una de las niñas detecta a un hombre encapuchado observándola a través de la ventana, pero sus padres no la creen. Pronto descubren que su hija tenía razón sobre aquel hombre y deciden investigar quién puede ser. Pero para desgracia de la familia descubren que l*a anterior familia que vivía en la casa fue asesinada por el padre* y se rumorea la vuelta de este al pueblo. A partir de entonces, sus vidas no volverán a ser las mismas.

El director, Jim Sheridan, deja atrás los dramas que la caracterizaron en la anterior década, p*ara embarcarse en un thriller psicológico. Para este decidió que Daniel Craig era el protagonista idóneo y no se equivocó.* También consideró que Naomi Watts tuviera un papel importante, pero debido a la composición de su personaje no podemos apreciar las dotes artísticas que vimos en otras tantas películas.

En la película podemos ver un gran feeling entre Daniel Craig y Rachel Weisz, y no es de extrañar teniendo en cuenta que durante el rodaje de este filme iniciaron una relación y actualmente están casados. Por ello, la actuación de Rachel Weisz, que se deja guiar por la interpretación de Craig, es impecable como siempre.

David Loucka, el guionista, llevaba sin escribir guiones desde hace 8 años y a la hora de elaborar este, se aprecia que le falta práctica, sobre todo en lo que a la construcción de personajes se refiere. Los personajes secundarios, carecen de personalidad, además de contar con intervenciones que luego no son justificadas. No es el idóneo, debido a la inactividad con la que contaba, pero tampoco es un mal guionista. John Debney se encarga de la música y, pese a que últimamente se ha dedicado a componer la música para películas infantiles y de comedia, podemos apreciar las dotes que demostró en “Sin City”.

Como buen thriller psicológico, la película está repleta de planos oscuros y paisajes nocturnos que generan una gran sensación de misterio.

La duración de la película es de alrededor de 90 minutos y en ningún momento se hace aburrida. Es más, tiene los tiempos perfectamente medidos y, quizás, si durase 30 minutos más, tendría alguna parte más lenta. “Detrás de las Paredes” es una película entretenida que va dirigida a los espectadores que disfrutan con los thrillers. Seguramente, estos aprecien que le falta algo de chispa para llegar a ser un thriller importante, pero las bases principales las tiene.

En definitiva, “Detrás de las Paredes” es un thriller psicológico que ofrece gran intriga. Cuando se empiezan a aclarar las cosas, hay una vuelta de tuerca para tratar de sorprender al espectador bastante efectiva. Como viene siendo costumbre, ver el tráiler te destroza la película y visionarlo es fatal si tienes intención de verla y que te sorprenda.

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