Llega un señor a su casa después de trabajar y le dice a su mujer:
- Mi amor, tengo un problema grave en la oficina.
Su mujer le responde:
- No te preocupes, gordito. Y nunca digas tengo un problema, di “tenemos” un problema, que te quiero mucho.
A lo que el marido replica:
- Bueno, muy bien! Entonces… ¡Nuestra secretaria va a tener un hijo “nuestro”!