El pasado 8 de junio de 2014, Sandra Bullock vivió una de las experiencias más aterradoras de toda su vida. Mientras estaba en su casa de Los Angeles escuchó un ruido y se sobresaltó. Preocupada por si alguna ventana se había quedado abierta salió de su habitación cuando vio a un desconocido en el piso de abajo. El hombre, que portaba una carta para la actriz y varias revistas con ella en portada, era Joshua Corbett.

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La Corte Suprema de la ciudad de Los Angeles le ha atribuido los cargos por acoso y allanamiento de morada. Una de las pruebas que se mostraron durante la audiencia fue la llamada telefónica que realizó Sandra Bullock minutos después de percatarse de que había un extraño en su casa. Con voz entrecortada, susurrando y llorosa, la actriz explica su situación al agente del 911: “Estoy escondida en el armario. Tengo una puerta de seguridad”.

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Corbett también está acusado de tener un arsenal de armas ilegales, incluyendo armas de asalto, balas rastreadoras y ametralladoras, que las autoridades encontraron cuando registraron su casa. No estaba armado cuando fue arrestado en la residencia de Bullock, según la policía. Sin embargo, él se ha declarado inocente de todos los cargos.

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