La saga fantástica del mago Harry Potter tiene un pasaje oscuro y está vinculado con uno de sus actores. No se trata de los intérpretes principales de las películas, sino de Devon Murray, quien encarnó a Seamus Finnigan.
Murray perdió su fortuna valuada en casi dos millones de dólares tras ser parte de las taquilleras cintas inspiradas en los libros de J.K. Rowling. De acuerdo con declaraciones de la madre de Devon, el irlandés despilfarró su dinero en mujeres y alcohol.
“Él era un adolescente, y fue y bebió, conoció chicas, compró autos, yo sólo tengo un hijo, y no iba a permitir que terminara así”, fueron las palabras de la señora Fidelma Murray. Estas impactantes confesiones surgieron luego que el exagente del actor, Neil Brooks, acusara al artista de deberle 200 mil dólares por pagos de representación.
En defensa de Murray, Fidelma aclaró que Brooks fue despedido hace varios años a causa de dejar que Devon Murray fumara cigarros en pleno rodaje de Harry Potter. La situación del otrora Seamus Finnigan es grave, ya que su situación financiera le impide contratar un abogado.
Este escándalo parece no importarle al joven histrión, quien no tuvo problemas en burlarse de las palabras de su madre a través de su cuenta en Twitter.
Sin embargo, la que alguna vez formó parte de Harry Potter deberá pagar a su exagente los 200 mil dólares que exigió, según órdenes del juzgado. Esto se debe a que el exmánager comprobó que nunca lo despidieron y esa cantidad de dinero le corresponde por los años de trabajo.
TE PUEDE INTERESAR
Harry Potter: mira el detrás de cámaras de la nueva película
Emma Watson criticada en Twitter tras su homenaje a Alan Rickman