accedió ingresar por tercera vez a rehabilitación para intentar superar sus problemas con el alcohol, pero esta vez con la ayuda de , su aún esposa y madre de sus tres hijos de quien está en pleno proceso de divorcio.

Según el portal TMZ, la actriz llegó hasta la casa de la tarde del último miércoles, luego que este fuera captado el lunes recibiendo una caja llena de alcohol en la puerta de su casa, mientras festejaba su cumpleaños.

Tras sostener una larga conversación, logró convencer a Ben Affleck de que necesitaba recibir ayuda profesional y el aceptó internarse en una clínica especializada para tratar su adicción.

Incluso, fue la misma Jennifer Garner quien llevó a al centro de desintoxicación, ubicado en Los Ángeles. Ambos abandonaron la vivienda del actor al promediar las 6 p.m., según informó una fuente a TMZ.

En marzo de 2017, Ben Affleck confesó que acababa de terminar un tratamiento por su alcoholismo tras varios años de lidiar con sus problemas con la bebida.

“Quiero que mis hijos sepan que no hay de qué avergonzarse por buscar ayuda cuando la necesitas”, señaló Ben Affleck en un comunicado público en el que no precisó la fecha en que fue internado

El noviembre de ese mismo año, Ben Affleck recayó por segunda vez en sus problemas con el alcohol y tuvo que ingresar unos días en un centro de desintoxicación.