La tenista norteamericana, Serena Williams, se converite en la nueva reina del Abierto de Australia tras imponerse ante la rusa Maria Sharapova por 2 sets contra 0 con parciales de 6-3 y 7-6 en Melbourne.

El saque siempre es el arma letal con el que Serena mantiene la diferencia ante Sharapova. En los últimos 12 enfrentamientos anteriores, Serena conectó 108 saques directos, con 37 dobles faltas, mientras la rusa hizo 24 “aces” con 73 dobles faltas. Este sábado ese arma letal, con una efectividad del 88 por ciento con el primer saque fue la apisonadora con la Serena construyó su victoria.

Serena, sobre la que había algunas dudas por su catarro, fue muy superior a Sharapova, que intentó cambiar la historia de sus duelos, con inteligentes dejadas para sacarla del fondo de la pista y agotarla, pero solo consiguió que la número uno la destrozara con un avasallador juego desde la línea de saque y tremendos servicios, uno de ellos a 203 kilómetros por hora, que la colocan como la mejor sacadora de la historia.

La número uno del mundo tuvo que vencer a su compatriota Madison Keys para llegar a instancias finales. La estadounidense, partió como favorita tras 15 encuentros ganados consecutivos contra Sharapova y este juego no fue la excepción.

De esta manera Williams obtiene su décimo noveno título de Grand Slam para acercarse a solo tres del récord de 22 en manos de la alemana Steffi Graf. Por su parte, Maria Sharapova sigue con una deuda pendiente: no ganar a Serena Williams por más de 10 años.

Como se recuerda, la rusa no vence a la menor de las Williams desde hace más de 10 años. Lo hizo por última vez en 2004 en el Masters de Los Ángeles y, desde entonces, perdió los 16 partidos que jugó con Serena, que tiene una asombrosa ventaja de 17-2 en el historial.

Jugadora SETS 1 2 3 4 5

Williams 2 6 7 0 0 0  

Sharapova 0 3 6 0 0 0  

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