Luego de 17 meses fueras del deporte por una doble operación en un pie y lesiones sucecivas, el serbio Janko Tipsarevic retornó en singles en Houston Open, con una dramática victoria sobre Guilherme Clezar por 6-4, 3-6 y 7-6 (7) en un juego de tres horas.

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“Me saludó más gente que cuando nació mi hija. Necesitaba ganar este partido. Me noté un poco duro en la cancha, pero lo más importante fue percibir que la zona respondía bien a la presión del partido. Hoy me duele todo, menos el pie”, sostuvo el ex Top 10, que dos semanas atrás había tenido su primera escala en el dobles de Miami, junto a Novak Djokovic.

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“No me sentía confianza, pero los match points que salvé me probaron lo contrario. Después de eso no podía perder el partido. Me hubiera entristecido demasiado”, agregó el serbio sobre su juego. Su camino en Houston continuará ante un rival de mayor exigencia como Santiago Giraldo.

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