La policía de Brasil concluyó la investigación sobre la presunta denuncia falsa realizada por el nadador estadounidense durante los Juegos Olímpicos y encaminó sus conclusiones a la Justicia para que sea juzgado por “falsa comunicación de crimen”, según fuentes policiales.

Tras escuchar a las partes implicadas y analizar el contenido de unos vídeos que grabaron tanto a , como a los también nadadores James Feigen, Gunnar Bentz y Jack Conger en la noche de autos, las autoridades encaminaron el resultado de la investigación al juzgado especial de Grandes Eventos, informó la Policía Civil.

Asimismo, los policías de la Comisaría Especial de Apoyo al Turismo, responsables de la investigación, solicitaron a la Justicia que se le comunique de manera oficial a , que se encuentra en Estados Unidos, sobre la apertura del proceso y que se informe del mismo a la Comisión de Ética del Comité Olímpico Internacional.

La Justicia de Brasil ya imputó por este delito a y Feigen la semana pasada, después de que las autoridades detectaran algunas lagunas al relatar un supuesto asalto que dijeron haber sufrido al salir de una fiesta y que posteriormente fue desmentido por la Policía.

La primeras investigaciones demostraron que los cuatro deportistas de Estados Unidos, entre ellos Ryan Lochte, estuvieron en una fiesta acompañados por tres mujeres y que, cuando regresaban a la villa olímpica, pararon en una gasolinera próxima, en Barra de Tijuca, y provocaron destrozos y un enfrentamiento con los empleados y guardias de seguridad.

En un principio un juez prohibió la salida del país de los cuatro deportistas, pero Ryan Lochte se apresuró a regresar a su país al comprobar el alcance de sus polémicas palabras.

La fiscalía presentó cargos por “falsa comunicación de crimen” contra Feigen, quien selló un acuerdo con la Justicia después de una audiencia de cuatro horas, en la que su defensa se comprometió a pagar una multa de 35 mil reales (unos 10.800 dólares).

Bentz y Conger, quienes llegaron a ser impedidos por las autoridades de embarcar en un avión con destino a Estados Unidos, fueron finalmente autorizados a abandonar el país tras prestar declararon durante más de tres horas.

Ryan Lochte, que llegó a disculparse públicamente por lo ocurrido y que ha perdido en los últimos días a varios patrocinadores, podría tener que prestar declaración en su país, instancia que fue sugerida por las autoridades locales.

Ryan Lochte reconociendo su mentira en Río 2016

EFE