na histórica y emotiva ceremonia abrió este viernes los Juegos Olímpicos de Invierno de , donde se escenificó el acercamiento de las dos Coreas con su desfile conjunto bajo una sola bandera y la inusual presencia de autoridades norcoreanas.

Esta aparición de los dos países, partidos desde 1945 y técnicamente aún en guerra, fue el epicentro de la inauguración y desató una sonora ovación de los 35.000 espectadores que llenaron el estadio olímpico del condado surcoreano.

El broche final a la ceremonia la puso la patinadora surcoreana Kim Yu-na, venerada como un tesoro nacional, al encender el pebetero olímpico.

En total, 2.925 deportistas de 92 países diferentes competirán por 102 oros en los XXIII Juegos Olímpicos de Invierno, los mayores hasta la fecha.

Los 15 deportes incluidos en la cita se desarrollarán en 12 recintos (cinco para hielo, siete para nieve) situados en torno al condado surcoreano de PyeongChang (a 130 unos kilómetros al este de Seúl), donde se celebrarán los Juegos hasta el próximo 25 de febrero.

EEUU, con 242, cuenta con el mayor número de deportistas (cifra récord en unos JJOO de Invierno), mientras que de Rusia, otra de las potencias mundiales en deportes de Invierno, habrá 168 atletas que competirán bajo bandera neutral, ya que el país está suspendido por el COI por un escándalo de dopaje.

El país anfitrión, Corea del Sur, aporta 144 deportistas. En tanto Corea del Norte ha llevado a 22, todos ellos invitados por el COI y en el que se cuentan las 12 jugadoras de hockey sobre hielo que se han integrado con compañeras sureñas en un equipo unificado, el primero que presentan los dos países desde 1991.