El mundo del rugby ha quedado paralizado tras una acción desleal. Ben Flower, jugador de los Wigan Warriors, protagonizó una bochornosa reacción al agredir a Lance Hohaia del St. Helens en los primeros compases del partido celebrado en Old Trafford.

La acción se produjo en plena Super League Grand Final, por lo que su impacto mediático fue muy amplio, teniendo en cuenta la gran expectación que había despertado el encuentro especialmente en Inglaterra.

Las críticas hacia el jugador de los Warriors no se hicieron esperar, especialmente debido a que el voluminoso deportista de 26 años ‘remató’ a su rival cuando yacía tendido sobre el césped. Una actitud intolerable, pese a la anterior carga a destiempo de Hohaia, que provocó que las redes sociales clamasen contra Flower duramente pidiendo una sanción ejemplar.