El base Mike Conley regresó como líder imparable del ataque de los Grizzlies de Memphis, que gracias a sus 22 puntos, dieron la sorpresa en la jornada de semifinales de la Conferencia Oeste al ganar a domicilio 90-97 a los Warriors de Golden State en el segundo partido de la serie que empataron a 1-1.

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Conley, que no pudo jugar en el primero al estar convaleciente de la operación de cara que le hicieron hace ocho días tras sufrir la fractura de varios huesos, volvió en plenitud y fue la llave maestra que abrió la puerta del gran triunfo conseguido por los Grizzlies que le quitan la ventaja de campo a los Warriors, el equipo con la mejor marca de la temporada regular.

El base titular de los Grizzlies, que también realizaron una gran defensa y se aprovecharon del pésimo control de balón que tuvieron los Warriors, anotó 8 de 12 tiros de campo, incluidos 3 de 6 desde fuera del perímetro y dio tres asistencias.

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Conley, que salió al campo con una máscara transparente de protección, superó sin problemas el inconveniente y la falta de adaptación, inclusive el tener todavía inflamada la cara.

La única satisfacción de la noche para Stephen Curry fue el haber recibido antes del partido el trofeo de Jugador Más Valioso (MVP) durante la pasada temporada.