Empezó una nueva temporada de la Fórmula 1 con un susto. En la vuelta 18 del GP de Australia el McLaren de Fernando Alonso se volcó y terminó completamente destrozado sobre las murallas de contención.
El español iba detrás del mexicano Esteban Gutiérrez y tras querer adelantarlo, golpeó su trompa con el alerón trasero del Haas y salió disparado por los aires.
La imágenes son realmente escalofriantes y afortunadamente Fernando Alonso salió ileso. Los encargados del Gran Prix decidieron suspender la carrera por unos minutos para limpiar los retos del auto que quedaron regados en la pista.
“He sido muy afortunado. Me duele un poco todo porque en un accidente de este tipo se te mueve todo el cuerpo. Quizás las rodillas es donde más dolor tengo al haber chocado contra el chasis varias veces. Mañana aún tendrá más dolor”, dijo Fernando Alonso tras el choque.