En México y Colombia “Santiago” es el nombre más común, incluso es la capital de Chile. Su uso puede ser por la colonización de España a América Latina, que trajo consigo los nombres de sus santos como el de Santiago el Mayor, también conocido como Saint James.

En Venezuela el más común es Sebastián. En Estados unidos y Canadá “Ethan”, “William”, “Jacob” y “Liam” parecen ser los favoritos, pero destaca el nombre de “José” en Texas, esto quizá por ser una de las ciudades con mayor presencia latina.

“Mohamed” aparece como el más popular en el mundo musulmán, especialmente en Oriente Medio y Norte de África. Se escribe de diferente porque existen muchas formas de traducirlo del árabe. También es el más común en Tayikistán y Malasia. Otra forma de escribirlo es “Mamadou” y es el más usado en Mali.

Esta tendencia continuó con la migración a Europa, pues fue el nombre que más se utilizó en Bruselas en 2008 y Londres en 2009. El uso del nombre “Mohamed” es un recordatorio de la importancia del nombre tanto en la cultura islámica como en la musulmana.

En Irán y Azerbaiyán, destacan “Amir-Ali” y “Ali”. En Turquía es “Yusuf”, también religioso ya que proviene de Joseph (José), antiguo israelita que tuvo un rol importante tanto en el Judaísmo como en el Cristianismo.

El predominio de “Juan Pablo” en Filipinas es un reflejo la relación de las ciudades del Sureste Asiático con el Catolicismo, que España llevó hace quinientos años.

En las ciudades Cristianas Ortodoxas de Europa Oriental, como Bulgaria, Grecia y Georgia, “Georgi” es el número uno y se deriva del mártir y santo cristiano San George.

Rusia parece ser una excepción con el nombre de “Alexander”, principalmente por razones nacionalista, pues fue el nombre de tres emperadores rusos en los siglos XVIII y XIX.

Fuente: LaPatilla.com