El hombre que salvó la vida de Jhon F. Kennedy en 1943 en pleno desarrollo de la Segunda Guerra Mundial murió este lunes a los 93 años en las Islas Salomón.

La historia de su encuentro empieza en agosto de ese año cuando Eroni Kumana y su amigo navegaban por la aguas del Pacífico Sur, cuando tropezaron con el que más tarde sería el presidente de Estados Unidos.

Kennedy, quien tenía en ese entonces 26 años y era teniente de marina, y 10 de sus compañeros marines se habían resguardado en una pequeña isla de coral tras el ataque de un destructor japonés a su embarcación.

Allí permanecieron dos días con la esperanza de encontrarse con alguien que los ayude a huir sin levantar sospechas, pues la marina nipona navegaba constantemente por la zona.

Al ver a los navegantes, el asesinado presidente se acercó a los nativos y escribió sobre la cáscara de un coco un mensaje donde pedía su rescate.

Kumana tomó el coco y junto a su amigo remó 65 kilómetros a través de aguas controladas por japoneses, hasta la base aliada más cercana.

Los acontecimientos de esa semana iban a tener un impacto profundo en la vida de ese joven marino, pues se convirtió en un aclamado héroe reconocido por sus esfuerzos en salvar la vida de su equipo.

Este hecho le valió varios galardones entre ellos un Corazón Púrpura. Su éxito en la vida militar, particularmente en esta acción en la guerra fue fundamental para su triunfo en la elección presidencial de 1960.

Fuente: BBC