El proceso del reclutamiento de nuevos agentes de Inteligencia es actualmente mucho más trasparente que antes. Un buen agente, según la página oficial de la Agencia de Inteligencia Exterior del Reino Unido, más conocida como M16 ( encargada de el terrorismo y la proliferación nuclear mediante la recopilación de información secreta de Gobiernos extranjeros), “debe tener la habilidad de comunicarse con diversos tipos de persona”, además de poseer un título universitario, informa ‘The Independent’.

En contra de la creencia popular, el trabajo de un agente de Inteligencia no es muy peligroso, dado que no debe “enfrentarse a sus enemigos cara a cara”, como James Bond.

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Cuando es necesario obtener acceso a las instalaciones de algún Gobierno u organismo, los espías reclutan a personas pertenecientes al ente investigado para que lleven a cabo la misión.

Además, el trabajo de un ‘espía’ en realidad consiste en investigar constantemente y de manera minuciosa. Cualquier detalle, por insignificante que pueda parecer a primera vista, es importante.

Los agentes también dedican mucho tiempo a la vigilancia tecnológica, monitorizando teléfonos y otros canales de comunicación. Se considera que el M16 es capaz de escuchar simultáneamente todo el ruido digital de un área de tamaño del Gran Londres.

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