El trabajo policial en nuestro tiempo esta lleno de recursos, sin embargo, en el siglo pasado e incluso a fines de 1800 aún era muy básico y hasta bizarro.

Diferentes portales web de historia revelan que los investigadores prácticamente tenían que esperar a que alguien confesara un homicidio, pues no había forma de demostrar la culpabilidad de alguien.

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Por ejemplo, el proceso fotográfico del daguerrotipo fue inventado en 1830, pero la policía francesa ni si quiera lo usó para identificar víctimas hasta 1870.

La tecnología ha avanzado desde entonces, pero el proceso de fotografiar las escenas de crimen, los investigadores tenían que mover los cuerpos, alterando así la escena del crimen. Cuando la ciencia avanzó, se usaron trípodes gigantescos para tener mejores retratos de los cadáveres.

Afortunadamente, hoy en día se cuenta con diversos instrumentos para dilucidar un crimen.