Un grupo de científicos de la Universidad Estatal de Michigan (EE.UU.) ha desarrollado una tecnología que puede ayudar a convertir toda clase de ventanas en fuentes de energía.

Han creado un material plástico capaz de capturar la luz del sol y convertirla en electricidad sin por ello perder su transparencia. Su objetivo es conseguir, a largo plazo, superficies invisibles que ayuden a mejorar la eficiencia de infraestructuras y dispositivos electrónicos.

“Nadie quiere sentarse tras un cristal tintado”, asegura Richard Lunt, líder de la investigación. “Nosotros hemos trabajado para que la capa luminiscente activa sea transparente”. Su tecnología, que se denomina ‘concentrador solar luminiscente’, no es nueva. Sí es la primera que lo consigue sin alterar el color del material.

“En última instancia queremos hacer superficies capaces de captar energía del sol sin que el usuario se dé cuenta”, explica.

Su captador solar se basa en unas moléculas orgánicas que son capaces de absorber los rayos de sol que llegan en las longitudes de onda no visible. Más allá del infrarrojo y del ultravioleta.

“Podemos modificar estos materiales para que capturen el infrarrojo cercano y el ultravioleta y que después brillen en otra longitud de onda en el infrarrojo”, señala Lunt. Esta luminiscencia va a los bordes del plástico, donde pequeñas células fotovoltaicas la convierten en electricidad.

Fuente: Abc.es