“Esta es una opinión muy respetable, pero que no compartimos por cuanto el TC, como institución autónoma y las funciones que le asignan la Constitución, está obligada a administrar justicia constitucional y a ejercer control de constitucionalidad que no se puede interrumpir por ninguna circunstancia”, señaló el presidente del Tribunal Constitucional, Óscar Urviola, a la prensa.

Urviola consideró como temas sensibles los relacionados con los jubilados, los procesos en los que cientos de trabajadores están esperando la reposición del trabajo, los ciudadanos que han sido privados de la libertad y el tema de los bonos de la reforma agraria.

Sin embargo, Urviola opinó que las declaraciones del presidente no fueron un acto de tomar injerencia en el TC.

“Quizás un deseo del presidente de que el Congreso acelere el proceso de selección y nombramiento, para que esta institución se vea renovada en la magistratura que le corresponde”, agregó.