La congresista fujimorista aseguró este viernes que la advertencia de la sobre una suspensión del es “puro humo” y un intento de intimidar al Parlamento para que no derogue la ley de fortalecimiento del fútbol local.

“Es un tema de intimidar y darles herramientas a los dirigentes de la Federación Peruana de Fútbol y algunos congresistas para que, al momento de tomar las decisiones, se tomen de blindaje, de amiguismo”, declaró la parlamentaria de Fuerza Popular.

“Ellos (la FPF) ya debieron adaptarse desde el 2016. Por eso, en mi opinión, esto es puro humo”, indicó Noceda, una exdeportista de motonáutica.

Un grupo de legisladores planteó esta semana que la Ley de Fortalecimiento de la FPF, dirigida por , sea derogada porque presuntamente es inconstitucional, al permitir que su titular permanezca en el cargo hasta 2020.

La legisladora Marisa Glave dijo que esa ley se impuso “en medio de la fiebre mundialista” causada por la clasificación de y fue producto de “una negociación” entre Oviedo y el actual presidente del Congreso, el fujimorista Daniel Salaverry.

No obstante, Noceda opinó que resulta “preocupante” que la FIFA no se haya pronunciado “al tener una ley con nombre propio, en donde sí se evidencia que hay una injerencia de parte del Estado”.

El diario El Comercio publicó una carta enviada por la secretaria general de la FIFA, Fatma Samoura, al secretario general de la FPF, Juan Matute, en la que informa de que la eventual suspensión de Perú fue discutida este miércoles por la Comisión de Federaciones Miembros del ente rector del fútbol.

Samoura señaló que la Comisión “decidió apoyar la implementación de la hoja de ruta elaborada por la FPF, que se estableció tras la promulgación de la ley y permite la revisión de los estatutos del fútbol peruano conforme a los requisitos de la FIFA y la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).

La dirigente indicó que esa revisión incluye la convocatoria a elecciones de nuevos dirigentes de la FPF “a más tardar, para diciembre de 2019”.

Los opositores a Oviedo sostienen que este no puede mantenerse al frente de la FPF porque es acusado por un fiscal de ser el autor mediato (con dominio del hecho) del asesinato de dos dirigentes sindicales de una empresa azucarera de su propiedad en el norte peruano, algo que el dirigente niega.

EFE.