Cinco días antes del secuestro de Kepashiato, que desencadenó los posteriores ataques terroristas y la muerte de 4 policías y 2 militares, una nota de Inteligencia era enviada desde Huancayo, como suerte de SOS, al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, al Ministerio de Defensa y a la Dirección Nacional de Inteligencia.

El asunto era: “Probable accionar terrorista de connotación por parte de DDTT (delincuentes terroristas) de la OT-SL (organización terrorista Sendero Luminoso) contra BBCCTT (bases contraterroristas) y/o Efectivos de las FFO (fuerzas del orden) que operan en el VRAE”, según el semanario ‘Hildebrandt en sus Trece’.

El documento, sellado como secreto, señala que “ante la captura del DT (delincuente terrorista) ‘Artemio’, posiblemente los DDTT (delincuentes terroristas) ‘Gabriel’ y ‘Yuri’ realicen alguna acción armada en contra del proyecto Camisea, del Centro Poblado Kepashiato, distrito Echarate, provincia de La Convención, departamento del Cusco, con el fin de obtener dinero, explosivos, armamento, etc., y de esta manera marcar una connotación nacional e internacional”.

De acuerdo con el semanario, la nota de Inteligencia fue elaborada en la Sección de Inteligencia y Contrainteligencia de la 31 Brigada de Infantería de Huancayo, que forma parte del Comando Especial VRAE.

Esa nota, además, advertía que “delincuentes terroristas ‘Gabriel’ y ‘Yuri’ (…) estarían esperando el momento oportuno” y que “se realizarán acciones armadas de connotación contra las Fuerzas del Orden (…) mediante el empleo de armamento colectivo, fusilería y explosivos (carga y minado)”.

Sin embargo, nada pareció persuadir a los altos mandos militares para tomar acciones al respecto, según el semanario.

Fuente: ‘Hildebrandt en sus Trece’