Luego de generar polémica por mentarle la madre a un tuitero que previamente lo insultó y criticó por pertenecer al Partido Aprista, el congresista Mauricio Mulder minorizó el hecho.

“Soy congresista, no uso sotana ni soy papa ni doy bendiciones. Tengo calle y tampoco me voy a dejar”, refirió al respecto.

Mulder negó que su respuesta, criticada por muchos, haya sido un exabrupto pues utilizó los mismo términos que el sujeto.

“Nunca hago exabruptos. Yo tengo una vida cotidiana y tengo barrio. ¿Acaso ustedes no lo tienen?”, preguntó a los periodistas agregando que “si alguien viene con este tipo de cosas se merece ese tipo de respuestas”.

Sobre la posibilidad de que sea llamado por la Comisión de Ética para explicar el asunto, dijo: “Eso sería para reírme”.

Por otro lado, manifestó que hasta ahora no ha podido hablar con su compañera, la parlamentaria Luciana León, quien compró cuatro departamentos en menos de dos meses.

“No he podido hablar con ella, no porque no haya querido llamarla sino que las contingencias políticas de este fin de semana lo han impedido”, precisó.