Fue parte de los congresistas que pidió que el ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, sea interpelado, sin embargo cuando llegó ese día se mostró bastante ocupada vendiendo rifas.

La congresista Luz Salgado se dedicó a vender boletos en vez de escuchar la exposición del ministro, quien acudió al parlamento para explicar las denuncias por presuntos chuponeos y seguimientos a personajes de la oposición por parte del Gobierno.

Al ser consultada por su accionar, Salgado se justificó aduciendo que el sorteo es para apoyar una obra benéfica en favor de la Iglesia María Auxiliadora, ubicada en la avenida Brasil.