El presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso, Gustavo Rondón, negó este jueves un “blindaje” a favor de los exministros Rafael Rey y Hernán Garrido-Lecca, al no haberse determinado responsabilidades individuales en el caso del contrato con Global CST.

Pese a las críticas generadas por el informe aprobado por ese grupo de trabajo, el legislador alegó que la investigación fue “seria”, “prolija”, y “sin apasionamientos políticos”.

Según aseguró, las pesquisas efectuadas permitieron reconocer la existencia de “serias deficiencias administrativas” en el contrato que suscribió en el 2009 el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas con dicha empresa israelí, “mas no un acto doloso”.

“Se trató de un caso mediático con una gran repercusión, pero lo que hemos podido encontrar es que lo que se ha cometido son deficiencias e irregularidades de orden administrativo, y no dolo. Por eso no se puede manchar la honra de las personas”, argumentó.

Rondón sostuvo, además, que “no se pudieron comprobar los presuntos lobbies” a favor de Global CST, por lo tanto, añadió, no se ha podido determinar la comisión del delito de tráfico de influencias contra Garrido-Lecca.

Asimismo, sostuvo que la Contraloría incurrió en un error al emitir una nota de prensa alegando que este contrato habría perjudicado al Estado peruano en más de 40 millones de nuevos soles, “cuando ese hecho no se ha podido probar”.

Fuente: Agencia Andina