La Contraloría General de la República ha declarado la guerra a la corrupción, aseguró el titular de esta entidad, Fuad Khoury, quien rechazó las críticas según las cuales no han actuado decididamente para combatir este flagelo.

Mencionó, por ejemplo, que las denuncias contra los presidentes regionales de Tumbes y Cusco, se formularon a partir del trabajo de la Contraloría.

Asimismo, subrayó que en la región Áncash, donde las autoridades investigan una red de corrupción y sicariato encabezada presuntamente por el presidente regional César Álvarez, la Contraloría General de la República denunció a 2,785 funcionarios por malos manejos.

Estimó que en total la Contraloría ha detectado unos S/. 50 millones malgastados en irregularidades, consignados en 771 informes de control, 431 acciones de control, y 2,700 denuncias ante el Ministerio Público y el Poder Judicial, para 222 casos penales.

Khoury mencionó en Panorama el caso de la compra de ambulancias realizada en la gestión de César Álvarez, donde hubo una sobrevaloración de S/. 1.5 millones, o el canal de regadío de Huecrocha, con S/. 3,5 millones en pérdidas.

Con esos datos, consideró injusto afirmar que la Contraloría no hace nada por combatir la corrupción.

No obstante, anunció que este año centrarán su labor en obras, sector donde, dijo, se presentan la mayoría de casos.

En el caso particular de Áncash, aclaró que la Contraloría nunca dio un certificado de buena conducta, sino simplemente una comprobación de que el presupuesto se estaba ejecutando.

Señaló que investigan y denuncian, pero la lucha contra la corrupción también depende del Poder Judicial y el Ministerio Público.

En ese sentido, señaló que en los cinco años que lleva como contralor se han denunciado penalmente a 2,750 funcionarios, 1,500 por la vía civil.

No obstante, comentó que solamente hay once denunciados condenados a penas de cárcel.

Fuente: Andina