El cabecilla de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, y el jefe de los remanentes subversivos del Vraem, Víctor Quispe Palomino, fueron denunciados por la masacre de pobladores del humilde distrito de Soras, en la región andina de Ayacucho, perpetrada hace 28 años.

El anuncio lo formuló el fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, en una ceremonia pública en la que entregó los restos de 7 pobladores de los más 100 campesinos asesinados el 16 de julio de 1984.

La masacre fue realizada por una columna dirigida por Quispe Palomino, la cual recorrió varias comunidades de los distritos de Chipao (Lucanas) y Soras (Sucre), a bordo de un bus denominado “bus de la muerte”.

“Con esta entrega se cierra el círculo del terror que han vivido estas familias. Los deudos podrán rendirle ahora luto y cristiana sepultura, un derecho que se les negó de manera cruel”, manifestó Peláez Bardales.

Precisó que la fiscal provincial de la Segunda Fiscalía Penal Supraprovincial de Ayacucho, Jhousy Aburto Garavito, presentó la denuncia penal ante el Poder Judicial contra los terroristas que acabaron con la vida de los pobladores de Soras.

El Fiscal de la Nación explicó que se han exhumado los restos de 321 víctimas de la masacre terrorista en Ayacucho, de las cuales el Equipo Forense Especializado (EFE) del Ministerio Público ha logrado analizar a la fecha los restos de 269 víctimas.

Fuente: Andina