El fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, dijo que la eventual aprobación y aplicación de la pena de muerte para los narcoterroristas que secuestran niños, no es la solución, y señaló que en esos casos se debe sancionar con la cadena perpetua.

Argumentó que la experiencia internacional indica que en los países donde se aplica, la pena capital no tiene el efecto disuasivo deseado, ni ayuda a disminuir la criminalidad.

Señaló, en ese sentido, que la pena de muerte es una propuesta “ideológica” y que no representa una solución viable.

“Lo primero es descubrir los hechos y luego aplicarle la pena que está prevista en la legislación nacional, que es la cadena perpetua para los terroristas que explotan y hacen comercio de niños y los ponen a disposición de las armas. No es un tema de ahora sino de hace 30 años”, añadió.

Advirtió que a los cabecillas terroristas no les interesa la vida de las personas, ni su propia integridad, por lo que la pena capital no es disuasiva.

Peláez Bardales indicó, además, que el Perú debe ser respetuoso de los convenios internacionales como la Convención Interamericana de Derechos Humanos, y no denunciar estos tratados como lo han hecho otros países en la región.

Fuente: Andina