El cardenal Juan Luis Cipriani destacó hoy el respeto y la corrección que primaron en la reunión sostenida entre el mandatario Pedro Pablo Kuczynski y Keiko Fujimori, de Fuerza Popular, en el inicio de la ronda de diálogo convocado por el Ejecutivo con las fuerzas política del Congreso.

“Lo que puedo rescatar es que tanto el presidente de la República como Keiko Fujimori han tenido una actitud, y el mérito es de ellos, de enorme respeto uno por el otro y de expresar sus discrepancias con toda corrección”, declaró a la prensa.

Según dijo, en el país se debe intercambiar opiniones con un lenguaje correcto y respetuoso y no a través de los insultos, desacreditando a la gente.

“El Perú es de todos y el pueblo está pidiendo orden, trabajo, disciplina, progreso no discusiones. Ojalá todos cambiemos nuestro lenguaje”, manifestó el cardenal.

Consultado sobre el caso Odebrecht, sostuvo que “la corrupción es un cáncer, una enfermedad muy grave que hace mucho daño a credibilidad de todo el mundo”, y corresponde investigarla y corregirla, pues no puede ser puesta “en agua tibia”.

“Entendernos, dialogar, es importante, pero la corrupción debe ser desterrada sin excepciones y no con palabras gruesas o insultos. Quien ha cometido irregularidades en cargos públicos tiene grave consecuencia, hay que desterrar y atacar siempre a la corrupción”, añadió.

Para Cipriani, en función a lo leído, en este caso ha habido una fábrica de corrupción, por parte de la empresa, la que corrompió, pero también está la figura del corrompido.

“He escuchado que se dice corrupción nunca más, violencia nunca más. El ser humano tiene inclinaciones, ojalá fuera nunca más, pero debemos estar despiertos para corregir a los corruptos, castigar las cosas mal hechas, pero no con violencia verbal ni material”, añadió. (Fuente: Andina)

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