Los asesores de la defensa chilena estuvieron trabajando de “sabuesos”, revisando actas en la biblioteca adjunta de la corte para responder a los alegatos de Perú por el diferendo marítimo.

“Vamos a trabajar de sabuesos”, dijo el director jurídico de la Cancillería de Chile, Hernán Salinas, junto a un grupo de especialistas de la defensa cuando ingresaban a la biblioteca de la Academia Internacional del Derecho, ubicada en el segundo piso del edificio donde se realizan las audiencias por el litigio marítimo.

En la biblioteca, la más completa del mundo en materia de derecho internacional, Salinas, la abogada Astrid Espaliat y el comandante de la Armada John Ranson, estuvieron revisando las actas oficiales de los 10 años de negociación de la Convención del Mar, de 1971 a 1981, en busca de antecedentes, citas y argumentos que serán utilizados en la respuesta que entregará Chile a la pregunta que formuló el juez marroquí de La Haya, Mohamed Bennouna.

Chile tiene copias de las actas de la negociación de la Convención del Mar (el reglamento de la ONU que regula el derecho marítimo) en Santiago y en París, en las oficinas del estudio de abogados Freshfield, pero como se trata de 20 gruesos volúmenes, algo más grande que la Enciclopedia Británica, optaron por no traerlos a La Haya, más aún cuando en la biblioteca del Palacio de la Paz están las actas oficiales.

Fuente: La Tercera